Desde la marcha de Tom King, la cabecera principal de Batman cayó principalmente en manos de James Tynion IV tras su paso por Detective Comics. Tras esta etapa, el elegido ha sido Chip Zdarsky, cuyo trabajo en Daredevil le hizo destacar entre multitud de cabeceras carentes del menor interés dentro de Marvel. Ya hemos podido leer el primer número del Batman de Chip Zdarsky, que analizamos a continuación.
EL BATMAN DE CHIP ZDARSKY
No es esta la primera incursión del conocido guionista en Batman. A modo de prueba, se hizo cargo de Batman: El Caballero, una miniserie estupenda camino de su final en ECC Ediciones. Con el buen sabor de boca que me está dejando esta nueva versión de la vieja historia del entrenamiento de Bruce Wayne para ser Batman, tenía mucha curiosidad para ver cómo lo integraba Zdarsky en la continuidad. Nos encontramos con un Bruce que sigue sin estar en la posición económica que todos hemos asumido siempre. Lo que ocurre es que esta decisión me parece un lastre. No es rico, pero tampoco es pobre. O ya me dirás cómo sigue teniendo batcueva, un buen ático y manteniendo el batmóvil. No acaba de aportar mucho esto de hacer que Bruce sea un pijo del montón.
En cuanto a su personalidad, no ha dado mucho tiempo en este primer número en saber hacia dónde lo dirigirá Zdarsky. En Batman: El Caballero perfila muy bien la psicología de Bruce Wayne. Hay alguna pista acerca de la importancia de Bruce sobre Batman. En este número, al ser el primero, Zdarsky parece haber elegido la acción sobre la psicología. No se la juega y nos presenta villanos conocidos, en un lugar clásico entre los clásicos. La batfamilia tiene una importante presencia, lo que nuevamente da pistas acerca de lo que quiere construir Zdarsky. En cuanto a Catwoman, también tiene su momento, aunque la decisión respecto a ella nos resulte muy decepcionante a los fans. Al menos a los más clásicos.
A grandes rasgos, nos encontramos con un Batman recio, muy centrado en la misión. Un número que funciona a modo de presentación, con acción, flashes del pasado, y un momento impactante que veremos hacia dónde nos va llevando. Un buen punto de partida, aunque es pronto para saber dónde nos llevará Zdarsky.
EL DIBUJO DE JORGE JIMÉNEZ
Seguimos con la excelente regla de que a Batman sólo le dibujan los mejores. Y Jorge Jiménez lo es. Trazos estilizados y bellos, personajes bien detallados, con un Bruce y un Batman imponentes. El colorido de Morey le va muy bien también. Destaca la figura central, haciendo que el trasfondo acompañe con los tonos de la mejor manera. Si la escena es dramática, la expresividad del arte de Jiménez y el talento de Morey hacen algo digno de ver y disfrutar. Esperemos que se queden el máximo tiempo posible en la cabecera de Batman.
LA SEGUNDA HISTORIA: DOS PÁJAROS DE UN TRONO
Tras la primera historia centrada en Batman, nos encontramos otra protagonizada por Catwoman. Lejos de ser completamente ajena a lo que acabamos de leer, entronca con lo visto en el estreno anterior. También guionizada por Chip Zdarsky, aunque con menos ambiciones, vemos cómo afecta a Catwoman lo visto en el primer capítulo. No puede evitar ser algo genérico, a lo que no ayuda el diseño de la superheroína tan parecido a una adolescente. Belén Ortega, con todos mis respetos, no es precisamente Jorge Jiménez a los lápices. Una historia simpática que encajaría dentro de la continuidad de Catwoman, pero que deja la sensación de poder haber sido mejor.
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