El nombre de Alex Ross es bien conocido por los aficionados al cómic. Es venerado en muchas ocasiones y sus dibujos se distinguen a la perfección. Su estilo pictórico realista asombra en cada viñeta. Se prodiga bastante más como portadista, ya que debe llevarle bastante tiempo terminar sus obras. Aunque la fama le ha llegado como dibujante e ilustrador, en esta ocasión se ha atrevido como guionista. Los Cuatro Fantásticos: Círculo Cerrado es la primera obra de Alex Ross a cargo del dibujo y el guión. ¿Qué podemos decir de esta obra?
LOS 4 FANTÁSTICOS DE ALEX ROSS
Ross ha trabajado tanto para Marvel como para DC, en obras tan destacables como la imprescindible Kingdom Come. En este caso, ha sido la Primera Familia de Marvel la que ha servido de estreno para su trabajo completo como guionista y dibujante. Ross ha sido conservador en su apuesta, y muy respetuoso. Los Cuatro Fantásticos: Círculo Cerrado nos plantea una historia autoconclusiva, centrada en los componentes clásicos del grupo. Ben, Johnny, Reed y Sue viven juntos en el edificio Baxter. Tiene reminiscencias de los años ochenta, por la juventud de Johnny Storm y la situación personal que se intuye entre los miembros del equipo. Ross no pretende arriesgar en su primer guion oficial, y se lo agradecemos. Respeta las personalidades tan marcadas que tenían los componentes de Los Cuatro Fantásticos.
Alex Ross nos introduce, cómo no, en la Zona Negativa. Tenemos un villano, las explicaciones de Reed que tan nervioso ponen a La Cosa, universos fantásticos y la interacción entre los componentes del grupo. No se trata de revolucionar el género, sino de homenajear la etapa clásica y más esencial de Los 4F. Una historia que bebe de los años 80 y homenajea la etapa de John Byrne en Los Cuatro Fantásticos. Unos protagonistas muy reconocibles, que dejan un buen sabor de boca, con una trama sencilla y positiva que cumple con su cometido.
EL DIBUJO Y EDICIÓN DE LOS CUATRO FANTÁSTICOS: CÍRCULO CERRADO
Lo mejor que puedo decir del dibujo es que se me escapó un ¡ohh! de admiración al abrir las páginas. No había visto a los integrantes de los 4F dibujados por Alex Ross previamente. Y es que Ross es de esos dibujantes que deseas saber cómo interpretará a este u otro personaje. Y vaya Cuatro Fantásticos que nos presenta. Me ha recordado mucho a Jack Kirby en la representación de los mismos, o en alguna impresionante splash page que imita los fondos fotográficos que a veces utilizaba El Rey. Los rostros son clásicos, más propios de un cómic de los 60 o 70 que de uno actual. Se aleja así de excentricidades o modas. Este tomo es, por tanto, mucho más disfrutable para aquellos que hemos crecido con los 4F. Es el dibujo el que manda en este tomo, estando el guión al servicio de este. Así tenemos grandes viñetas, y diálogos que cumplen pero que no destacan. El colorido también es magnífico.
En cuanto a la edición, es excelente. El tamaño es algo mayor que el de un comic book al uso. El cómic ha sido editado en tapa dura —con un diseño bicolor muy setentero— con una espectacular sobrecubierta-póster desplegable. Esta incluye una breve presentación del origen del supergrupo con ilustraciones exclusivas para esta edición y una biografía de Alex Ross. El papel es de gran calidad, de alto gramaje, por lo que no debemos sorprendernos del precio. No veo mal los 25 euros que cuesta tal y como está todo. Es una delicatessen y, como todos los productos gourmet, hay que pagarlos. El cómic pertenece a la línea Marvel Arts, fruto de la colaboración entre Marvel Comics y la editorial Abrams ComicArts.
CONCLUSIONES DE LOS CUATRO FANTÁSTICOS: CÍRCULO CERRADO
Considero que Marvel debería centrarse en este tipo de iniciativas, sobre todo con aquellos personajes que no necesitan presentación. El último relanzamiento de los 4F en serie regular me dio vergüenza ajena y lo dejé de seguir.
Marvel debería fomentar este tipo de historias y ediciones, novelas gráficas a las que pudiéramos acercarnos los aficionados y los que no lo son tanto sabiendo que estamos ante un proyecto cuidado y hecho con ganas. Sin ningún tipo de presión en lo referente a la continuidad. Marvel ha lanzado algunas interesantes propuestas, como Spiderman: Toda una Vida, pero DC Comics lo fomenta mucho más. Sobre todo con Batman, casi siempre con excelentes resultados, comerciales y de calidad.
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