MEGABANNER

BATMAN, DE TIM BURTON. 25 ANIVERSARIO: 10 COSAS QUE NO SABIAS DE LA PELICULA

El 23 de junio de 1989 fue el día que eligió Warner para el estreno de Batman, dirigida por Tim Burton. La celebración del 50 aniversario del personaje no pudo salir más redonda para la compañía, ya que desató una auténtica bat-manía, especialmente en los USA, y cambió la imagen campy que venía arrastrando el personaje desde la serie de los años sesenta protagonizada por Adam West. Sin embargo, hay muchas cosas de esta producción que os sorprendería saber. Hemos recopilado para vosotros 10 de las más interesantes, para que sepáis más de una película que, guste más o menos, fue clave para que hoy día siga siendo un acontecimiento cualquier película relacionada con El Caballero Oscuro.


1. ORIGEN DE LA PELICULA: Si alguien piensa que Warner sencillamente se dio cuenta de que Batman tenía un gran potencial en el cine y decidió hacerle una película, está muy equivocado. De hecho, vendieron los derechos a Michael E. Uslan, un hombre de clase trabajadora obsesionado con llevar al cine al personaje como él lo conoció en los cómics y alejarlo de la imagen ridícula que quedó tras la serie de los 60. El propio vicepresidente de DC Comics, Sol Harrison, le dijo a Uslan que no desperdiciara su dinero, que Batman no le interesa a nadie. El resto de consejos eran todavía peores. Pero una cosa es que Warner no quisiera hacer nada con el personaje, y otra que le fuera a vender los derechos baratos, así que Uslan, para renovarlos por primera vez, tuvo hasta que pedir prestado a familiares y amigos... y lo peor, soportar durante años los comentarios de su suegro, que pensaba que su hija y nietos iban a tener que terminar alimentándose de los cómics de Uslan.

NI A WARNER, NI A BURTON, NI A NOLAN... LAS GRACIAS HAY QUE DARLAS A ESTE SEÑOR

2. EN BUSCA DE UN DIRECTOR: Aunque los derechos se obtuvieron el 3 de octubre de 1979, el proceso hasta el estreno de la película llevó 10 años. En principio, se pensó en 1980, pero el continuo baile de ejecutivos, de directores interesados y vinculados como Joe Dante (Gremlins) o Ivan Reitman (Cazafantasmas) que de repente ya no lo estaban, alargaron el proceso, con el gran sufrimiento económico de Uslan. Finalmente, Tim Burton fue el elegido en 1986, que sólo tenía en su currículum el corto de Frankeenweenie y La Gran Aventura de Pee Wee. No fue hasta el éxito de Bitelchus que finalmente tuvo luz verde para el proyecto.

3. TENIA QUE SER UN BATMAN SERIO... O NADA: A pesar de que Burton ha dicho públicamente que nunca ha leído un cómic de Batman, si que tuvo que inspirarse en los cómics antiguos para cumplir con la condición imprescindible para hacer la película: tenía que ser un Batman serio y oscuro. Con deciros que se rumoreaba a Eddie Murphy para Robin, ya os hacéis idea de que no era esa la intención de muchos. Burton rodó la película en solo 12 semanas, con un guión de Sam Ham y Warren Skaaren.

EL BATMAN DE NEAL ADAMS ERA UNA DE LAS INSPIRACIONES DE LA PELÍCULA

4. GOTHAM CITY: Si algo hay que reconocerle a Burton es que se molestó en que Gotham City pareciera Gotham City (o al menos, una calle de Gotham City). Sin embargo, la única referencia al aspecto de la ciudad era una frase en el guión: "Gotham City... como si el infierno hubiera brotado desde debajo de la tierra". El diseñador de producción Anton Furst lo tomó como una Nueva York sin ordenación territorial, y se inspiró en distintos arquitectos enfrentados, incluido Gaudi, para ofrecer esa Gotham intemporal que quería Burton. Gracias a la lograda ambientación de Furst, rodada en Pinewood Studios, la película ha aguantado bastante bien el paso del tiempo.

5. LA ELECCIÓN DE BRUCE WAYNE/BATMAN: Aunque el guión describe a Bruce Wayne como alguien con músculos de acero, el protagonista elegido fue el cómico Michael Keaton. No solo no gustaba al productor, a Bob  Kane o al guionista, sino a más de 50.000 personas que escribieron a DC mostrando su enfado. La cuenta que echaron fue la misma que con las quejas que hubieron con  la elección Affleck: ninguna. Burton rebatía una a una las quejas: demostró que Keaton era un buen actor, que podría engañar con su verdadera altura y que el traje disimularía la falta de musculatura. Burton se centró en desarrollar Bruce Wayne, apoyado en la profundidad que Keaton daba en el personaje y su obsesión, para que la gente creyera su Batman. Aunque Keaton no hizo el ridículo, muchos nos preguntamos que tal habría sido esta película con alguien que no hubiera tenido que disimular tantas cosas. Por cierto, Keaton tampoco había leído nada de Batman, así que le pasaron El Regreso del Caballero Oscuro.

UNA MANDÍBULA CUADRADA NO TE HACE SER BATMAN, PERO NO SE PUEDE INTERPRETAR AL PERSONAJE SIN ELLAS, ASÍ QUE PRÓTESIS AL CANTO... TOTAL, UN TRUCO MÁS.

6. LA ELECCIÓN DEL JOKER: Jack Nicholson era la primera opción desde los años ochenta que Uslan lo vio en un anuncio de El Resplandor, pero el actor no se decidió a aceptar el papel hasta que se enteró que Robin Williams iba a hacerse con él. Ésto molestó enormemente a Williams, que se sintió utilizado por Warner, y decidió no trabajar más con ellos hasta que se disculparan. Otros actores que sonaron para el papel fueron David Bowie o William Dafoe.

7. LA ELECCIÓN DE VICKY VALE: Para este papel, en cambio, sonaron todas las actrices de la época con un mínimo de relevancia, desde Sigourney Weaver a Michelle Pfeiffer. La primera elegida fue Sean Young, pero debido a un accidente ensayando una escena a caballo con Keaton tuvo que ser sustituida, tanto ella como la escena a caballo para que no pasara más. Así que el papel se lo quedó el sex symbol de la época, Kim Basinger. Young lo volvió a intentar con Batman Returns vestida de Catwoman, pero Tim Burton la tomaría por gafe o algo, así que se escondió bajo su mesa de despacho para despistarla. Cuando algo no está para uno, Sean...

LA VICKY DE LOS CÓMICS ES PELIRROJA DEBIDO A UN ERROR, ASÍ QUE NADIE PROTESTÓ A BASINGER

8. LOS CAMEOS: Esta película casi destaca más por los cameos que no pudieron ser que por los que fueron. Por un lado, Bob Kane, el hombre que fue lo bastante listo como para exigir aparecer como creador de Batman, aunque muchos atribuyan la autoría a Bill Finger, no pudo hacerlo debido a que cayó enfermo. Según cuenta divertido Stan Lee, éste le bromeaba ante el éxito abrumador de la película de que no perdiera la esperanza, que lo mismo algún día alguien hacía una película de Spider-Man. Quien si aparece es el propio Burton, como uno de los matones del Joker. Pero otro que se quedó fuera fue Adam West que, optimista él, a sus 60 años de entonces aspiraba directamente al papel de Batman. Ni le ofrecieron ese, ni ningún otro.

9. LA MÚSICA: En los 80, la música en las películas era algo que se cuidaba mucho, una bonita costumbre que han dejado morir. Para las canciones de la película (la banda sonora estaba a cargo de Danny Elfman) preguntaron a Michael Jackson, admirador confeso del personaje. Éste no pudo aceptar, así que recurrieron a su archienemigo, Prince, que hizo el disco en 6 semanas. Aunque a muchos les horrorizó aquello del batdance, fue todo un éxito de ventas, llegando al número 1 y apoyando a la película, donde sonaban algunas canciones. Eso si, no esperéis que Prince las cante en un concierto, no puede, los derechos son de Warner.


10. LAS CIFRAS: Con un presupuesto de 35 millones de dólares, el estreno superó las más increíbles expectativas, siendo la película más taquillera de 1989 en USA, con 251 millones de dólares, y 411 mundiales (en la recaudación mundial ganó Indiana Jones y la Última Cruzada, con 474 millones totales). Para despejar las primeras dudas, estrenaron un trailer en cines sin avisar que encantó a la audiencia. Es más, comenzó la moda entre los fans, cuando internet ni existía para la gente normal ni se le esperaba, de pagar sólo para ver el trailer y salirse antes de que empezara la película que fuera. El merchandising fue también brutal, como lo fueron los ingresos de Jack Nicholson, que incluía un porcentaje sobre estos y la taquilla, ganando 60 millones de dólares con la película, todo un récord. De todas formas, la batmanía (y la especulación) abarcó también a los cómics, que disfrutaron de tiradas de ventas de más de 4 millones de ejemplares por grapa en la fantástica era en que Alan Grant y Breyfogle llevaban el cómic.




Publicar un comentario

0 Comentarios