RED WIDOW, EPISODIO 1X01. LA CRITICA

Red Widow, la nueva serie de la ABC, es así como Los Soprano pero en versión descafeinada para amas de casa. La serie trata sobre eso, un ama de casa, Marta Walraven (Radha Mitchell) quien, de la noche a la mañana, ve como su tranquila y cómoda existencia es puesta patas arriba por el asesinato de su marido. Si solo contamos esto, la serie podría ser un procedimental o un drama más del montón sobre la típica mujer fuerte que lo supera todo. Sin embargo, si añadimos que Marta es hija de un mafioso ruso y que además su hermano y su marido eran socios en el negocio de la droga, la serie toma otros derroteros.

La serie se deja ver, aunque su temática hubiera encajado mejor en un canal de cable como Showtime o FX, donde podría haber dado bastante más de si. Uno de los fallos, a mi parecer, de Red Widow es la elección del casting. Radha Mitchell (Pitch Black) no tiene el suficiente carisma para soportar ella sola el peso del show, eso para empezar. Aunque es hija de un mafioso y esposa y hermana de traficantes de droga, no parece estar muy al tanto de los tejemanejes de sus allegados, algo poco creíble  Sin duda el personaje debe sufrir la misma amnesia que algunas políticas españolas, ignorantes de los chanchullos de su maridos.

LA IMPROBABLE MARTA WALRAVEN (RADHA MITCHELL) JUNTO A SCHILLER (GORAN  VISNJIC)

Otro fallo en el casting es la elección del actor Anson Mount (Heels on Wheels) para interpretar el efímero papel del marido de Marta, Evan. El actor interpreta a un marido y padre ejemplar, con aspecto de surfero buenrrollista, el cual nos llega a caer tan bien a pesar de ser un traficante de marihuana que nos sentimos contrariados cuando lo matan. ¿No podrían haber elegido un actor menos carismático y haber asignado otro personaje a Mount? Ni el socio de Evan ni el hermano de Marta, Irwin (Wil Traval), nos importan lo más mínimo. El padre de Marta, Andrei Petrov (Rade Serbedzija), puede que su nos de grandes momentos en la serie si exploran los tonos grises del personaje. Aunque, a la vista de como nos lo están dibujando (poco más que un abuelete con una esposa florero 40 años más joven), parece que el talento del actor croata va a ser desperdiciado.

Tampoco ha sido bien escogido el personaje antagonista de Marta, el mafioso Nicholae Schiller (Goran Visnjic). A pesar de que se alude a el constantemente como una especie de monstruo, el actor que saltara a la fama con la serie Urgencias es demasiado atractivo y se comporta de una forma que contradice como se nos quiere pintar. Es más que probable que veamos más adelante como Marta tiene un romance con Schiller, y si no ¿por qué han elegido a un actor tan atractivo como villano en una serie que no es de HBO? En Juego de Tronos nadie se extraña que el atractivo actor danés Nikolaj Coster-Waldau haga de villano. En Red Widow si que queda bastante raro que Goran Visnjic sea el malo de la función, a menos que vaya a liarse con la protagonista.

A PESAR DEL PÓSTER, SIN NINGÚN PARECIDO CON UNO DE LOS NUESTROS

Red Widow, a pesar de lo que nos cuenta, es una serie claramente enfocada a un público mayoritariamente femenino, tanto por la elección de una protagonista femenina como por la manera en la que hacen avanzar la historia. Aunque no es un procedimental, con un caso semanal que hay que solventar, tiene elementos comunes con este tipo de shows tan populares en USA, aunque salpimentado con los rasgos característicos de las series enfocadas al público femenino, como Scandal, Revenge o Deception. Esto no nos ha de extrañar si tenemos en cuenta que la creadora de la serie es Melissa Rosenberg, la cual tiene en su haber cosas tan distintas como Dexter o La Saga Crepúsculo.

En definitiva, una serie enfocada al público femenino, a pesar de estar ambientada en el mundo de la mafia rusa. Esto es, sin embargo, solo una excusa para presentarnos por enésima vez a la típica ama de casa que es capaz de todo para salir adelante, algo que ya hemos visto en demasiadas series. Al menos, Red Widow ofrece la novedad de que la protagonista no ha de luchar por lo que ella ha conseguido con mucho esfuerzo para su familia, sino por el status que ha alcanzado por los delitos cometidos por su padre y su marido. Plena actualidad, vamos.