En los meses de verano es cuando en Estados Unidos se estrenan los grandes blockbusters, pero en España, preferimos la playa al cine. Apenas dos de las películas estrenadas este mes sí fueron muy taquilleras, una de ellas posiblemente el peor trufo del año, y la otra el final de la saga más rentable de la historia del cine hasta ahora. Empezamos por lo más desagradable, peor incluso que todo lo estrenado el pasado junio.
TRANSFORMERS 3 (Michael Bay): El director tuvo valor de decir que la segunda sí era mala, pero que en esta tercera corrigió los errores. Si, Michael, esta era El Padrino con robots. El anodino Shia LaBeouf, un desfile confuso de máquinas pegándose y una modelito anoréxica dando gritos. Rematado por una cara escena final tan espectacular como aburrida por el nulo interes de la ¿trama? Por ahí hacían el ridículo Patrick Dempsey (Anatomía de Grey) y John Malkovich. Para llorar. Esta saga es siempre lo mismo, pero cada vez peor. Al menos ésta ha recaudado menos. Más de lo que debería, pero menos que la segunda.
CABALLEROS, PRINCESAS Y OTRAS BESTIAS (David Gordon Green): Una historia absolutamente ridícula que, buscando la diversión del espectador, sólo consigue avergonzarlo con chistes burdos y ordinarios. Lo más sorprendente es que actores consagrados como Natalie Portman (Cisne Negro) o James Franco (El Origen del Planeta de los Simios) se hayan metido en esta patochada y con ello han engañado a unos pocos pensando que iban a ver otra cosa.
HARRY POTTER Y LAS RELIQUIAS DE LA MUERTE (David Yates): No somos seguidores de esta saga pero reconocemos que es histórica y merece ser mencionada. Un final a la altura de las anteriores y un último libro dividido en dos más por intereses económicos que cinematográficos. Lo bueno es que Warner se acostumbró a tener ingentes ingresos por ella y posiblemente busque entre los personajes de la DC la siguiente mina de oro. A ver si lo hacen bien.
TEMPLARIO (Jonathan English): Película de carácter histórico, aunque termine apostando más por el entretenimiento, que nos cuenta el nacimiento de la Carta Magna por parte del rey Juan de Inglaterra para contentar la rebelión de sus nobles ante el poder que éste tenía. Por supuesto, no lo cumplió y fue contra quienes le obligaron a firmarla. Más interiores que exteriores y sangrienta, pero tiene suficientes virtudes para echarle un vistazo.
PAUL (Greg Mottola): Fricada de visión obligada para cualquiera que sepa qué es la Comic Con de San Diego. Irreverente y divertida, las aventuras de los protagonistas nos demuestran que una buena idea es suficiente para que tengamos una película digna de ver. Tened cuidado a quien la recomendéis, ya que no es apta para los críticos gafapastas.
ARRIETTY Y EL MUNDO DE LOS DIMINUTOS (Hiromasa Yonebayashi): Melancolica y preciosa producción de dibujos nipona a años luz de las mentirosas producciones Disney. Dibujada a mano, nos cuenta la historia de supervivencia de una diminuta familia que vive en una casa de Tokio en la que un niño enfermo y abandonado emocionalmente por sus padres entra en contacto con ellos. Pueden verla los niños, pero gustará más a los adultos.
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