Los años noventa fueron bastante raros para los superhéroes. Por un lado, vendieron cómics como nunca debido a la burbuja económica que se creó alrededor de ellos, Por el otro, se primó la estética sobre el contenido, lo que nos dejó historias completamente olvidables. A pesar de todo ello, siempre hay alguien que se rebela y consigue aportar su talento. Es el caso de J. M. DeMatteis. Al guionista le fue encargado la cabecera El Espectacular Spiderman. Para ello, tuvo ojo y pidió que le acompañara el fantástico Sal Buscema. El resultado, lo tenéis en el tomo de la colección Marvel Héroes de Panini Cómics titulado, cómo no, El Espectacular Spiderman de J. M DeMatteis y Sal Buscema.
EL ESPECTACULAR SPIDERMAN: EL NIÑO QUE LLEVAS DENTRO
La trama de La Última Cacería de Kraven marcó un antes y un después en Spiderman. Como guionista de la misma, DeMatteis no quería dejar atrás las posibilidades que le daba un personaje como Alimaña. Y ya puestos, tampoco quería dejar pasar una historia que, en principio, había escrito para Batman y su cabecera Legends Of The Dark Knight. Estamos en 1991, y esa serie era la más prestigiosa de la época. Sin embargo, la trama que presentó DeMatteis referente a los traumas no enfrentados de la infancia, con Bruce y Harvey de protagonistas, no tuvo cabida en DC. Ese tema se había tocado recientemente en la serie y no les apetecía repetirlo. Así que DeMatteis, cambió a Bruce por Peter y a Harvey por Harry Osborn y asunto resuelto. Una pena para un fan de Batman como yo, que me hubiera encantado leerlo.
DeMatteis nos introduce en una historia muy adulta, tanto que hubo protestas por el tono de muchos padres lectores. Estos no encontraron a su amistoso vecino Spiderman, sino a un Peter torturado y unos temas que no consideraban apropiados para sus hijos. Como anécdota, lo leí de niño, y lo que más recuerdo es la viñeta de Mary Jane riéndose de una película que le encantó de pequeña y ahora veía ridícula.
El arco El Niño que Llevas Dentro es un viaje psicológico a los traumas de la infancia. De Peter, Harry y Alimaña. Sorprende la profundidad, objetividad y seriedad con la que el guionista trata un tema tan delicado. Hoy se menciona mucho la salud mental, pero no se profundiza, ni de lejos, como lo hace DeMatteis, verdaderamente adelantado a su tiempo.
Las biografías de los personajes sirvieron mucho de ayuda al guionista. ¿Cuándo hemos visto a Peter reflexionar sobre la muerte de sus padres? Nadie le pide que sea como Batman y lo refiera cada dos por tres, pero hay que reconocer que algo de crédito merecen por traerle al mundo. De Harry, ya sabemos la herencia envenenada de Norman Osborn y todo lo que le acarrea para poder tener una vida normal. A eso, le sumamos el trauma de Alimaña con su infancia. Lo aliñamos con la Doctora Kafka, una psicóloga de las que se implica hasta el fondo con sus pacientes. Y tenemos como resultado una de las historias más intensas de las que componen la trayectoria del Hombre Araña. A eso, añadir la maestría del dibujo de Sal Buscema. Claro, imponente, bien definido y de lo mas expresivo. Esto evita que estemos hablando de un diálogo excesivo, como podría parecer. Las viñetas hacen la mitad del trabajo. Y qué trabajo. El comienzo de este tomo no podría ser mejor que las siete entregas que componen El Niño que Llevas Dentro.
DEMATTEIS, UN AUTOR ADELANTADO A SU TIEMPO
Resulta muy divertido, a la vez que triste para todos aquellos que estamos acostumbrados a la lectura, la ignorancia que prima en estos tiempos. En el caso de J. M. DeMatteis, es inevitable pensar que estaba muy metido en temas psicológicos, esotéricos y paranormales. Esto está trasladado, de manera más o menos de directa, en sus historias. Tenemos el peso de la herencia familiar y la importancia de la infancia en nuestro desarrollo en todo lo vivido con el Duende Verde hijo. El parecido con El Joker es tremendo en la muestra de su locura. Todo el sufrimiento acarreado, como si fuera la verdadera herencia de su padre, y la importancia de romper el círculo. Recuerda poderosamente a un tema que ha puesto de actualidad la serie Mi Otra Yo. A eso, añadimos la historia de El Ojo del Puma, donde poco aporta Spiderman, pero se profundiza en los indios y en las leyendas referentes a sus ancestros.
Las teorías psicológicas y temas algo duros para el personaje en cuestión abundan a lo largo del tomo. Me parece muy interesante ver lo intenso que se ponen los personajes, desde Tía May a Peter Parker, pasando por Mary Jane Watson y los problemas psicológicos de Liz, la mujer de Harry Osborn. No olvidamos la molesta reaparición de los padres de Peter, que le viene impuesta por la continuidad a DeMatteis. A pesar de ello, los mete en el mismo embrollo psicológico que al resto de personajes del tomo.
En cuanto al dibujo, el más destacable para mí es precisamente Sal Buscema. Hay varios dibujantes a lo largo del cómic, pero ni Klaus Janson, a pesar de su fama por la saga The Dark Knight, está a su altura.
Añadir a modo final la pretendida introducción de nuevos personajes que, a pesar de no tener gran interés, al menos intenta darles un trasfondo. En definitiva, un tomo muy interesante, al igual que el que ya reseñamos Peter Parker, El Espectacular Spiderman: La Caza de la Araña, pero poco recomendable para quien quiera iniciarse en el héroe arácnido. Si te gustan los superhéroes torturados, te gustará este enfoque de Spiderman. Si ya eres un seguidor del trepamuros, difícilmente no apreciarás todo lo que DeMatteis le aportó.
0 Comentarios
Todos los comentarios son revisados antes de su publicación. Por favor, sé moderado e identifícate, nos gusta saber a quien nos dirigimos.