ARROW, EPISODIO 2X13, "HEIR TO THE DEMON". LA CRITICA

Empezamos la crítica de este sorprendente episodio de Arrow que sigue subiendo más y más las emociones de esta temporada. La aparición de Nyssa Al Ghul (Katrina Law) no ha podido ser mas impactante de lo que ha sido. Nos ha ofrecido además sorprendentes revelaciones, algo que ha tenido este capítulo a raudales. No podemos por tanto acusar al capítulo ni mucho menos de ser uno más de la temporada, sino que estamos ante un episodio clave de la temporada. 

¿SUMAMOS A NYSSA Y SARAH A LA LISTA DE HEROÍNAS LESBIANAS DE DC?

No hemos esperado nada para ver a Nyssa: la primera escena ha sido para ella. En un momento ha liquidado a todos los guardias del aeropuerto que querían detenerla al modo de la Liga de Asesinos: sin usar armas de fuego. La escena ha sido muy buena y creíble, algo complicado a priori, y cuando ha aparecido descendiendo por esos lazos, el efecto ha sido precioso. El traje que lleva ha tirado más por la tradición (pensando en los fans) que por lo práctico, ya que a Nyssa y a su hermana Talia las hemos visto con trajes mucho más ajustados en los cómics. La revelación de su relación sentimental con Sara nos ha dejado sorprendidos, pero era lo que más sentido tenía. Que tenga autoridad para liberarla como ha hecho está por ver, ya que Ra´s no suele ser benevolente con nadie. ¿Traerá consecuencias en el futuro a Sara y a la propia Nyssa?

UNA REUNIÓN FAMILIAR MENOS FELIZ DE LO QUE ESPERÁBAMOS

Siguiendo con mal de amores, nos toca Felicity, que ha conseguido un record: que la odie la que sería su suegra antes de tener nada con el hijo de ésta. Ir a revelarle a Moira Queen que ha descubierto que Thea es hija de Malcolm Merlyn no es nada inteligente por su parte. ¿Qué pretendía conseguir? No la iba a chantajear, y con informar a Oliver tenía suficiente. Enemigos los justos y necesarios, y más ahora que Moira puede ser la próxima alcaldesa de Starling City. Es lo que tiene querer liquidar a los pobres por la via rápida, que a mano dura no te van a ganar.

LA ACCIÓN NI HA FALTADO, NI HA DECEPCIONADO EN ESTE CAPÍTULO

Y por si fuera poco, también conocemos mejor el pasado de algunos personajes. Y no en la isla, sino en Starling City. El pasado como hermanas de Laurel y Sara y el sufrimiento que supuso la pérdida de ésta para su familia. Sin embargo, que éstos se enteren de que está viva no parece enternecer a Laurel: saber que murió por liarse con su novio y la típica envidia entre hermanas hace que no quiera saber nada de ella ahora que está viva, algo bastante cruel por su parte. Por supuesto, con la ayuda de una copa de vino. Que Sara y Oliver retomen la relación entra dentro de la lógica, aunque a algunos no les ha gustado nada. Ambos se conocen bien y comparten un pasado común. A donde lleguen es otra historia.

En cuanto a las ausencias, Slade Wilson, vuelve a presentarse como una sombra amenazante que no acaba de concretar el peligro, junto a Sebastian Blood. Roy Harper y el Escuadrón Suicida tampoco han aparecido en este capítulo, pero ya lo harán.

NO ME CREO QUE NO VEAMOS MAS A LA LIGA DE ASESINOS

Si a todo esto añadimos el anuncio que ha hecho el showrunner de que nos quedan personajes muy importantes de DC por ver, lo que queda de temporada puede ser épico. En cuanto a las audiencias, despegamos de los 2 millones pero no llegamos a los 3, en concreto 2,75 millones de espectadores. Menos mal que vamos remontando aunque sea poco. Esperemos que los próximos episodios sean como prometen.

Fuente imágenes: Facebook