MEGABANNER

5 SERIES QUE CAYERON EN PICADO EN SU SEGUNDA TEMPORADA

Hay una teoría según la cual la parte más fácil de realizar una serie sería la primera temporada, ya que lo que toca es plantear a los personajes y su mundo. Lo complicado es seguir desarrollando ese mundo y esos personajes. Hay ejemplos de series que van mejorando en cada temporada, como Vikingos o The Americans. Sin embargo, otras que tuvieron un comienzo por todo lo alto, no supieron mantener el nivel en la segunda temporada, pareciendo en algunos casos otra serie aunque fueran los mismos personajes. Eso si, os recomiendo encarecidamente que veáis la primera temporada de cada una de las series que os dejamos a continuación, porque si la segunda es peor, es porque la primera era terriblemente buena.


TRUE DETECTIVE: El bombazo de la primera temporada hizo que la segunda fuera tratada como un acontecimiento. Hasta Brad Pitt sonó como candidato para protagonizarla. Viendo el desastre de guión que ha resultado, de buena se ha librado. La primera temporada tuvo un perfecto equilibrio de personajes, con el torturado y pensativo Rust y el hombre común Marty, dirigidos magníficamente por un solo director, Cary Fukunaga, pero en la segunda se confundió más con mejor. Cuatro protagonistas, a cual más torturado de manera incomprensible para el espectador, y hasta 6 directores diferentes para sólo 8 capítulos, llevaron del cielo al infierno en las redes sociales la aparente exitosa saga de HBO. Veremos qué sucede con la tercera, si es que la hay, aunque francamente, me importa bastante poco.

UNA PAREJA CON UN DESTINO ABSOLUTAMENTE PREVISIBLE

DOWNTON ABBEY: Le tenía ganas a la celebérrima serie británica, y su primera temporada no me defraudó a pesar de tener bastante altas las expectativas. Sin contar las excelencias visuales y un exquisito vestuario y ambientación, el retrato de las distintas personalidades que pueblan la mansión no podía ser más sublime. Si no al nivel de Mad Men, casi. Pero llegó la segunda temporada, y lo que era sutileza se tornó simpleza, siendo retratados muchos personajes, antes poliédricos, como buenos y malos. Seguía siendo digna de ver, pero tramas culebronescas como la tontería del osito que Mary le da a Matthew (y casi todo lo que rodea a este romance) o el absurdo destino de la mujer de Bates, que parece salida de un cuento de brujas, bajaron el nivel que su creador, Julian Fellowes, no supo (o no quiso) mantener. Al menos la condesa viuda interpretada por Maggie Smith si mantiene mas o menos el nivel de mordacidad de sus comentarios. Ya es mucho.

DESPUÉS DE LA PRIMERA TEMPORADA, LO SUYO ES LEERSE EL LIBRO

LLAMA A LA COMADRONA: Otra serie británica basadas en las memorias de una comadrona, Jennifer Worth,que ejerció en los años 50 y 60 su profesión. Esta serie demostraba a las claras que no hay nada como la realidad para contar las mejores historias.  La verdad que impregnaba cada caso dotaba a la serie de un impacto brutal, ya que nos ahorraba lecciones morales y nos mostraba la dura vida de la clase obrera de esa época, aunque también sus bondades. Más de una vez me vi tirando de pañuelo para acabar el capítulo. Pero llegó la segunda temporada, y pareció que la liga de la moral se hubiera hecho cargo de ella. Si Jennifer estaba enamorada de un hombre casado, nada más se supo de ello. Los casos eran de repente políticamente correctos, y dejaron de emocionar para empezar a resultar conocidos de otras series e historias que poca realidad tenían detrás. O se les acabó el libro y se inventaron el resto, o el libro cae en picado a partir de lo mostrado en la primera temporada. Se que lleva cuatro emitidas, pero finalizada la segunda, ni me he preocupado de saber más de ella.

TRIUNFAR CON UN MUSICAL ES COMPLICADO. SUERTE QUE SE CONSIGUIÓ EN LA PRIMERA TEMPORADA

SMASH: Si la primera temporada tuvo alguna trama de relleno, lo compensaba con unas canciones preciosas y unos números musicales que eran estupendos. Todos conocemos a Marilyn Monroe y hacer un musical de su vida era una idea genial. El problema llegó con la segunda temporada. Otro musical, Hit List, homenajeando la historia del musical Rent. Muy famoso, si, y también con grandes canciones, pero que no consiguió ese interés del público que si alcanzó la primera. Embarazos y muertes tampoco ayudaron a mejorar la trama. Tanto la audiencia como la crítica la defenestraron desde su estreno, finalizando sin posibilidad de continuación.


MASTERS OF SEX: Una serie que se colocó entre las mejores de 2013 en su primera temporada, y más tratando un tema tan particular como el estudio científico de las relaciones sexuales. Les quedó una temporada soberbia, con un contenido Michael Sheen como el perfecto doctor William Masters, que no sabe expresar sus emociones (hasta que no puede más) y una Lizzy Caplan que atrapa desde el primer fotograma como Virginia. Sin embargo, las virtudes de la primera temporada desaparecen en la segunda, con eternos episodios de ambos protagonistas en el hotel que no llevaban a nada. A eso, añadir los exagerados traumas infantiles de William, que pasa a ser una parodia de lo que nos presentaron en la primera temporada, con su hermano echándole en cara tópicos del maltrato que sufrieron de pequeños. Para redondear, tenemos la trama racial de la esposa de William, Libby, también bastante simplona y forzada. Una segunda temporada que ha hecho que la tercera se me esté acumulando en el i-plus sin que tenga prisa por descubrirla.

Publicar un comentario

0 Comentarios