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AMERICAN CRIME, EPISODIO 1X01. LA CRITICA

El pasado 5 de marzo la cadena estadounidense ABC estrenó American Crime, una serie creada por el realizador y guionista John Ridley, ganador del Oscar de la Academia al Mejor Guión Adaptado por 12 Años de Esclavitud. La serie, un drama criminal, se centra en los distintos elementos, raciales, culturales y de género, que confluyen en un crimen que tendrá variadas e inesperadas ramificaciones. En este primer episodio vemos como Russ Skokie (Timothy Hutton) recibe el aviso de la policía de que su hijo, un veterano de guerra, ha sido asesinado y su esposa agredida sexualmente en un robo en su domicilio. Paralelamente, se nos presentan a otros personajes que, en mayor o menor medida, podrían estar implicados en el crimen, todos ellos con el denominador en común de pertenecer a los estratos mas desfavorecidos de la sociedad: una prostituta blanca, su novio negro que coquetea con las drogas, un latino que intenta colocar objetos robados, y un chico mexicano honrado que se ve involucrado en este sórdido crimen.

AMERICAN CRIME

La serie está escrita y dirigida por alguien que, a priori, está lejos de ser sospechoso de parcialidad y prejuicios raciales (John Ridley es afroamericano). Sin embargo, y aunque intenta posicionarse en una postura crítica con los problemas que acucian a las minorías étnicas en los Estados Unidos, transmite en cambio la sensación contraria. Todos estamos hartos ya del típico cliché de muchas series y películas norteamericanas en las que los villanos y criminales son hispanos o afroamericanos, y American Crime parece, a primera vista, luchar contra ello... Pero a mi no me ha transmitido eso, y si las buenas intenciones del creador del show no me resultan claras, poco interés puede tener para mi esta serie.

A pesar de la buena interpretación de Timoyhy Hutton como padre que recibe el tremendo mazazo de la muerte de su hijo, no podemos decir lo mismo de la actriz que interpreta a su esposa con la cual, al parecer, ya no convive. Felicity Huffman, quien encarna a la ex-esposa del personaje de Hutton, aparece en todo momento sobreactuada y poco creíble como una madre que acaba de saber que su hijo ha muerto asesinado. Parece mas empeñada en divulgar la noticia de su muerte y la violación de su nuera a los medios para airear lo malos que son los inmigrantes ilegales y pelearse con su ex-marido que por realmente afrontar la tragedia como lo haría una persona en el mundo real. 

BARB HANLON (FELICITY HUFFMAN) ES QUIZÁS EL PERSONAJE MAS ODIOSO DE LA SERIE

En cuanto al resto de personajes, todos ellos representan a los estratos mas desfavorecidos y conflictivos de la sociedad norteamericana. Desde un joven de color que intenta evadirse de la realidad con la droga junto a su novia blanca, a la que intenta apartar de la prostitución, hasta el ladrón de poca monta que intenta sobrevivir vendiendo objetos robados, pasando por el joven mexicano que intenta apartarse del férreo control al que le somete su padre para que no caiga en las bandas, la serie nos presenta a unos personajes y unos ambientes con los que es complicado conectar. Es precisamente la falta de conexión con esta marginalidad la que hace de esta serie un hueso duro de roer, cayendo, y en mi opinión este es su mayor defecto, en un desinterés por lo que les ocurra a todos los protagonistas total y absoluto. Y si a ello le sumamos la manera tan caótica en la que son presentados los personajes y como se va desenvolviendo la trama, American Crime está lejos de ser una serie redonda.


Pensada como una serie de una sola temporada (aunque parece que si va bien la ABC estaría dispuesta a renovar la fórmula con nuevos protagonistas), American Crime está recomendada para aquellos que gusten de los procedimentales, aunque quizás algunos se vean decepcionados por la falta de ritmo y la atmósfera demasiado opresiva que impregna al show (apenas hay música en la mayoría de las escenas). La falta de conexión con los protagonistas (algo mas, si cabe, con el honrado padre mexicano y su hijo) es todo un reto para el espectador, así como las ínfulas a serie de autor que su creador, John Ridley, ha querido dar a esta serie.

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