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THE AMAZING SPIDER-MAN 2: EL PODER DE ELECTRO. LA CRITICA

Aunque no leo críticas de películas que me toque reseñar, no se puede evitar que algunas impresiones te acaben llegando mediante tuits o titulares. En este caso, alguno era de lo más desalentador. Una vez vista la película, me tranquiliza poder decir que eran injustos. La película es satisfactoria en su conjunto, aunque no deja de haber componentes que si se hubieran desarrollado de otra forma, o bien eliminado o añadido, habrían hecho de esta una de las mejores películas de superhéroes hasta la fecha. Cuando vaya a soltar spoilers, tranquilos que avisaré. 

La película comienza contándonos qué sucedió con los padres de Peter (Andrew Gardfield). Francamente, creo que han desperdiciado un tiempo precioso en la película con este tema, que en si mismo no es especialmente interesante. No necesitábamos visualizar qué fue de ellos, puesto que ya lo sabemos. Encima, Peter lo descubre de una manera tan increíble y forzada que, para lo que necesitábamos saber, valía cualquier otro medio menos rocambolesco.
PODRÍAMOS HABERLA TITULADO "THE AMAZING SPIDER-MAN: EL PODER DEL AMOR" 
Porque el gran problema de la película está en que nos dan poco de lo que esperamos, y mucho de lo que no. Mucho Peter y Gwen (Emma Stone), pero poco Spider-Man... y poco Peter Parker. En la primera parte, donde nos cuentan el origen del personaje, se entiende que el héroe aparezca menos, pero en la segunda parte, todo ese lastre se supone que se ha soltado y podemos centrarnos en el día a día del superhéroe, y más en uno que da tanto juego como Spider-Man.

El director Marc Webb parece sentirse muy cómodo rodando escenas románticas, y gran parte del metraje se nos va en la disyuntiva de Peter entre cumplir la promesa que hizo al capitán Stacy de alejarse de su hija Gwen. Francamente, todos habríamos ganado si las escenas de ambos hubieran sido menos abundantes, y sin tantos problemas: tan solo una pareja que se lleva bien y que resulte simpática al público. Con unas simples pinceladas habrían bastado. Lo malo es que el tiempo que esas escenas se han llevado, las hemos perdido, entre otras cosas, para un mejor desarrollo de los villanos. La motivación de Max Dillon (Jamie Foxx) contra Spider-Man no hay por donde cogerla, y nunca se siente como una verdadera amenaza a pesar de su increíble poder. Su anodina personalidad, que no paródica, hacen que no lo recuerdes cuando no está en pantalla. Y eso que las escenas de acción son brutales, realmente asombrosas y grandiosas donde se evidencia que no han escatimado medios: lo malo es que no se construye un buen villano sólo con efectos especiales.
UN ELECTRO QUE NO CONVENCE
Mejor suerte creo yo que ha tenido Harry Osborn, tanto por la interpretación de Dane DeHaan, como por el trasfondo de su motivación. La escena que comparte con Peter está muy bien llevada y es suficiente para que conozcamos que son amigos sin que nos lo recuerden a cada momento. También es verdad que su comportamiento a veces es algo inexplicable, pero al menos sí podemos adivinar carisma dentro de el.

Sin embargo, no me ha dado la sensación de que estábamos ante demasiados villanos. Rhino (Paul Giamatti), por ejemplo, apenas ocupa unos pocos minutos, pero está bien así: representa muy bien el villano fanfarrón en sus dos versiones. Si la escena está bien medida y la historia está bien ensartada, no hay problema en que salgan muchos villanos. Más escenas como esas habrían venido bien a la película.
GENUINA ESCENA DE ACCIÓN DE SPIDER-MAN: RÁPIDA, DIVERTIDA Y TREPIDANTE
Sin embargo, antes de empezar con los spoilers, diré en favor de la película que no tiene malos diálogos, ni escenas ridículas, y que, aunque debería haberse permitido más momentos de humor, algo consustancial a Spider-Man, los que hay funcionan bastante bien. Tranquilamente alcanza el notable, aunque sea bajo, pero es una pena que Webb haya perdido la oportunidad de darle auténtica personalidad a su película, haciéndola más distinguible de otras muchas del género, también muy dignas, pero que no tienen un algo especial que las diferencie. A partir de ahora, SPOILERS.
HARRY OSBORN SI ATISBA UN VILLANO QUE PUEDE MERECER LA PENA
Parece que para Webb, Peter Parker se reduce a su novia y, para variar un poco, nos planta a la tía May (Sally Field). Sabemos que Peter está yendo a la universidad porque la tía May dice que se la está pagando, pero no lo vemos ni un segundo en ella, ni sabemos lo que estudia, ni nada. Nulas referencias, cuando el mundo personal de Peter en los cómics ha tenido momentos muy interesantes gracias a sus compañeros de la universidad, más incluso que los de las luchas con los villanos. Un gran momento perdido para presentar a Mary Jane como una compañera de la universidad que conocía a Gwen

Sin embargo, lo anterior es pecata minuta al lado de pasar de largo de la vida laboral de Peter: el Daily Bugle. Sencillamente hace una referencia a que vende fotos de Spider-Man, a lo tacaño que es el jefe, Jameson, y un triste mail. ¿Ya? ¿Qué pasa, tenía miedo Webb de que su visión no alcanzara lo que hizo Raimi, no se atrevió,  y en vez de eso pensó que lo que necesitábamos eran más escenas románticas de Gwen y Peter? Si pretenden ampliar la franquicia, han desperdiciado una oportunidad de oro de crear otro foco de interés en la misma: la plantilla del Bugle. Ver a Peter haciéndose fotos enmascarado, o cómo se vive en el periódico los acontecimientos vividos habría sido impagable y habría enriquecido mucho a la película. Por no hablar de presentar al menos a los personajes tan interesantes que hay en el periódico: Jameson, Betty Brand, Need Leeds, Robertson... Si piensan en Sony que con Los 6 Siniestros solamente pueden levantar una película, que la suerte les acompañe. 
ESTO ES TODO LO QUE VERÉIS DEL DAILY BUGLE EN THE AMAZING SPIDER-MAN 2
En cuanto a la muerte de Gwen, que ella misma se meta en una pelea de Spider-Man y Electro porque "toma sus propias decisiones" más parece un suicidio que algo por lo que sentirse culpable. Entiendo que la damisela en apuros está muy pasada y es machista, pero esta moda de las novias rescatadoras de sus novios superhéroes ya está muy vista y es excesiva. Ya puestos a homenajear el cómic, como hacen con el traje que lleva Gwen cuando muere, más emotivo habría sido tirarla del puente como hizo el Duende original, que no ese lío de piezas de reloj que parece que la han matado 4 veces. Mas icónico, más limpio, más creíble y más simple: menos a veces es más.
HAY UNA COSA BUENA ACERCA DEL NIÑO... SALE POCO
Sin embargo, el gran público seguramente no note estas carencias, y el sector femenino aprecie mucho esta focalización en la historia de amor, ya que dudo que el atractivo de Andrew Gardfield se pueda comparar al de Hugh Jackman (Lobezno), Chris Evans (Capitán América) o Chris Hemsworth (Thor) llevando féminas al cine. 

Veremos qué nos depara Spider-Man 3, ya que la Felicia que hemos visto, de momento, no parece que se vaya a enfundar el traje de Gata Negra, aunque dada su fidelidad a Harry, no descartaría que ensayaran con ella y nos diera la sorpresa. En cuanto a Harry y Los 6 Siniestros, si sigue tomando decisiones tan estúpidas como inyectarse lo primero que ve en vena sin pararse a realizar un mínimo análisis, no debe ser un gran problema para Spider-Man ni para nadie. 

Esperemos que pulan estos momentos y nos ofrezcan un equipo de villanos memorable en la tercera parte, y una inmersión en el mundo de Spider-Man que vaya mas allá de la novia de turno: de verdad que es algo que merecería la pena. 

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